La tecnología es una herramienta clave que se ha empezado a expandir por diferentes sectores buscando facilitar la manera en que nos relacionamos, accedemos a productos y optimizamos el tiempo. Particularmente, en el sector financiero la inclusión de la tecnología ha empezado a ocupar un papel importante con las fintech, no solo para mejorar el servicio y la oferta a los usuarios actuales, sino para incluir a más personas.
Con base en esto último es que han nacido la mayoría de las fintech. Pero, ¿a qué se refiere este término? Se trata de una palabra que nace de la unión entre dos términos en inglés: finance (financiar) y technology (tecnología). Entonces, se refiere a empresas que, a través de la tecnología, ofrecen a sus clientes productos y servicios financieros innovadores, cuya promesa de valor es ser menos costosos, simplificar procesos y ser más eficientes que los de la banca tradicional.
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¿Cuál es el objetivo de una fintech en Colombia?
Las fintech nacen a partir de dos necesidades principales: la de agilizar las operaciones económicas de empresas e individuos y la de democratizar el acceso al sector financiero. De hecho, el estudio Fintech Radar Colombia realizado por Finnovista, señala que el 75% de las fintech colombianas tiene el propósito de atender a quienes aún no han accedido a productos financieros, a partir de soluciones tecnológicas que agilicen la forma en que las personas se relacionan con estos.
La idea es el desarrollo de alternativas financieras que se caractericen por ser de fácil acceso y cuyo principal motor sea la tecnología, reduciendo costos y trámites. Por esta razón, las fintech han tenido que preguntarse cómo añadir valor sobre los servicios financieros actuales y cómo aprovechar la transformación digital para entregar mejores productos financieros con acceso a la mayoría de la población.
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¿Qué servicios ofrecen?
Las fintech se han desarrollado como empresas que tienen versatilidad para intermediar en diferentes ámbitos del mundo de las finanzas, de tal forma que pueden actuar como brokers, mediadores de pago; emisores, receptores o intermediarios de transferencias; compradores y vendedores de títulos valor; o asesores financieros. Las principales áreas en las que actualmente operan las fintech se pueden agrupar en las siguientes:
- Pagos y envío de dinero.
- Préstamos.
- Gestión de finanzas empresariales.
- Gestión de finanzas personales.
- Crowdfunding y crowdfactoring.
- Gestión de inversiones.
- Seguros.
- Educación financiera y ahorro.
- Soluciones de scoring, identidad y fraude.
- Trading y mercados.
- Banca móvil.
- Big data y modelos predictivos.
- Criptomonedas y monedas alternativas
- Mercado de divisas.
- Gestión automatizada de procesos y digitalización.
¿Cuál es el panorama de las fintech en Colombia?
De acuerdo con Colombia Fintech, asociación de empresas fintech colombianas, actualmente estas suman 180 con un crecimiento de 45% en los últimos 12 meses. Se trata de la tercera mayor fuente de empleo de la región detrás de Brasil y México; en el último año nacieron 78 emprendimientos y 22 cesaron operaciones en Colombia. Además, las fintech colombianas desplazaron del tercer lugar a Argentina, que debido a la crisis económica de ese país disminuyeron sus operaciones.
A pesar de que, según la encuesta de Banca digital de PricewaterhouseCoopers, la participación de la población en estas empresas es solo del 28%, el sistema bancario tradicional es consciente de que en el país las soluciones digitales son una amenaza latente y por esta razón han optado por, por ejemplo, aliarse con fintech. La oferta de valor de este modelo de negocio es la velocidad con la que están cambiando la forma de hacer los negocios.
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Aunque Colombia ocupa el tercer lugar en América Latina con respecto al desarrollo de este tipo de empresas, uno de los mayores retos es el tema de la regulación. Lo anterior porque, en varios casos, actúa como barrera para continuar innovando y no fomenta la creación de nuevas empresas.