Si actualmente estás buscando opciones para invertir tus ahorros pero no tienes claro qué debes tener en cuenta para empezar, este artículo seguramente será de gran utilidad.
De entrada, tienes que entender que no existe una fórmula mágica que te diga cómo puedes volverte millonario de un día para otro. Para lograr que tus ahorros crezcan, necesitas paciencia, disciplina, seguridad y motivación.
Debido a ello, en este post vamos a brindarte algunos consejos para que puedas tomar la mejor decisión y rentabilices tu dinero.
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Infórmate bien
Antes de tomar una decisión apresurada, revisa muy bien cuáles son las opciones disponibles en el mercado. Investiga muy bien los instrumentos financieros -tanto tradicionales como no tradicionales-, el riesgo, la rentabilidad y el tiempo en el cuál llevarás a cabo la inversión.
Este último punto es bastante importante y habitualmente no se tiene en cuenta. Para invertir tus ahorros de forma estratégica, debes revisar si quieres invertir en proyectos que te generarán rentabilidad a largo o corto plazo.
No tiene sentido que hayas visualizado una inversión a largo plazo aprovechando interés sobre interés, si al poco tiempo decides retirar el dinero porque cambiaste de opinión. Ten presente que algunos instrumentos financieros te penalizan y otros no te permiten sacar el dinero antes de la fecha establecida inicialmente.
De igual forma, debes conocer las características del canal que tienes pensado utilizar para invertir tus ahorros. Con el ‘boom’ de la tecnología, ahora dispones de un abanico de opciones para satisfacer tus necesidades financieras.
Además de la banca tradicional, existen otras opciones para personas naturales, empresas, emprendimientos, trabajadores independientes, entre otros. Una de ellas es la industria fintech, la cual es una de las alternativas con mayor desarrollo hoy en día, ya que se ha apropiado de la tecnología para revolucionar los servicios financieros.
No está de más recordarte que personas inescrupulosas crean empresas ficticias que prometen volverte millonario de la noche a la mañana y al final terminan quedándose con tus ahorros. Revisa que sea una empresa legalmente constituida, que esté inspeccionada por algún organismo de vigilancia, que cuente con filtros de seguridad, que te permita revisar tu inversión en el día a día y que te brinde toda la información que consideres necesaria.
¡No olvides el riesgo!
Una vez recopiles toda la información y conozcas perfectamente el funcionamiento del canal a utilizar, tienes que considerar qué tanto riesgo estás dispuesto a afrontar.
Si bien toda inversión conlleva un riesgo, tú tienes la libertad de decidir cuánto y cómo invertir tus ahorros. Para que tomes una decisión informada, es necesario que comprendas que el riesgo financiero es la posibilidad que la inversión que elegiste no genere la rentabilidad esperada.
Este cambio de valor de la inversión puede ser a la baja o al alza. No olvides que para obtener más rentabilidad debes estar dispuesto a correr más riesgos, por ello, cuanto más riesgosa es una inversión, hay mayor posibilidad de que el valor de esta aumente o disminuya.
En este sentido, es esencial que conozcas tu perfil de inversionista de acuerdo al riesgo que estás dispuesto a asumir. Según Educa, portal de educación financiera de la Comisión para el Mercado Financiero de Chile, existen 3 tipos de perfiles:
- Inversionista conservador: Exposición mínima al riesgo
- Inversionista moderado: Exposición media al riesgo
- Inversionista arriesgado: Exposición alta al riesgo
Bajo esta óptica y teniendo en cuenta que tus ahorros están en juego, la diversificación es uno de los mejores consejos para reducir el riesgo.
Este término se refiere a invertir en diversos activos. Esto quiere decir, repartir tu dinero en productos financieros que, ante posibles escenarios futuros, puedan reaccionar de manera diferente.
En otras palabras: “no pongas todos los huevos en una misma canasta”
¿En qué debes invertir según tu perfil?
Despójate de los miedos
Todas las personas que han rentabilizado su dinero con éxito aconsejan lo mismo: “empieza lo más pronto que puedas”. Es apenas lógico, ya que entre más rápido comiences a invertir tus ahorros, los frutos se verán reflejados en menos tiempo.
Para llevarlo a la realidad, debes despojarte de los miedos que no te dejan dar el paso:
- Deja de lado la palabra fracaso. Así como pasa en cualquier aspecto de la vida, debes sobreponerte cuando las cosas salen mal y celebrar cuando las cosas salen bien. Nunca vas a saber qué tanta rentabilidad hubieras logrado, si no pones a trabajar tu dinero.
- Olvídate del “qué dirán”. Tú eres el dueño del dinero y quien toma las decisiones, por eso, no dejes abrumarte por comentarios negativos y cuestionadores que no te aportan nada. Si quieres invertir en productos no tradicionales, infórmate bien, analiza todas las variables, toma la decisión y después evalúa si llenó tus expectativas.
Pese a que puedes sentirte cómodo con tu dinero en una alcancía, debajo del colchón, en una caja fuerte o en cualquier otro lugar que lo guardes, la realidad nos demuestra que el dinero pierde valor todos los días.
Debido al aumento de los precios de bienes, servicios, salarios y demás; la cantidad de dinero que tenemos disponible hoy no sirve para pagar la misma cantidad de productos en un año o dos. Por ello, lo recomendable es que pongas a invertir tus ahorros lo más pronto posible para que tu dinero crezca paulatinamente.
Para cerrar, memorízate este refrán: “Los grandes árboles comenzaron siendo pequeñas semillas”
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