Estamos seguros de que la preocupación más frecuente que tienes cuando vas a empezar a invertir tiene que ver con cómo evitar la mayor pérdida posible. Aunque no debes olvidar que toda inversión, sin excepción, tiene un riesgo asociado, queremos contarte acerca de la diversificación: la mejor forma de reducir el riesgo.
¿Quieres saber qué es la diversificación? ¿Cómo hacerlo? ¿Por qué diversificar? A continuación te contamos.
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¿Qué es la diversificación?
La diversificación se refiere a invertir en diversos activos. La idea entonces es repartir tu dinero en productos financieros que, ante posibles escenarios futuros, puedan reaccionar de manera diferente. Mientras en un activo estás perdiendo, en otro, tus ganancias están subiendo.
Este principio no garantiza que no vayas a tener pérdidas, pero es probable que estés reduciendo el riesgo que se genera cuando inviertes. En general, puedes mejorar la rentabilidad que obtienes en relación al riesgo que asumes.
¿Por qué? Porque si no diversificas los rendimientos dependerán únicamente de los resultados de una inversión; pero si divides tu capital en varios productos, tus ganancias serán el resultado del promedio de la rentabilidad de todas las inversiones que hiciste.
De esta forma, puedes diversificar con productos financieros de alto riesgo, con otros más seguros pero que presenten menos rentabilidad, con opciones a corto plazo, medio y largo. En resumen, lo importante es que la combinación de activos en los que decidas invertir corresponda a tu perfil de inversionista, a tus objetivos y a tus necesidades.
¿Cómo diversificar?
Debes tener en cuenta que no existe una fórmula que indique que tu portafolio está bien o mal diversificado. La clave en realidad es: entre más diversos sean los activos que componen tu cartera, menos riesgo habrá.
Entonces es importante que los productos financieros que elijas no guarden relación entre ellos. No es suficiente con tener activos distintos, debes asegurarte de que no exista entre estos exposición al mismo tipo de riesgo, sector, moneda, entre otros.
Con base en lo anterior, puedes diversificar teniendo en cuenta los siguientes criterios:
- Tipos de interés. Puedes seleccionar activos tanto de renta fija, como de renta variable y mixta.
- Tipos de activos. Es importante seleccionar diferentes productos de acuerdo a su tipo, por ejemplo: acciones, bonos, productos alternativos, fondos de inversión, entre otros. En general combinar títulos que se puedan diferenciar por sus niveles de riesgo, liquidez, emisores, vencimientos, empresas.
- Sectores. De acuerdo al ciclo económico y coyunturas, existen sectores con mayor o menor éxito. Cuando eliges diversificar según los sectores, disminuyes el riesgo de que, en caso de crisis, sea vea afectado todo tu portafolio.
- País o moneda. Usualmente las monedas de cada país fluctúan de forma distinta y por lo tanto, las pérdidas no se conectarán en un mismo momento.
Generalmente, se suele diversificar combinando activos de cada uno de los anteriores grupos. Sin embargo, la elección de uno u otro dependerá de tus objetivos: la rentabilidad que planees obtener, el riesgo que quieras asumir o tu perfil de inversionista.
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¿Por qué aplicar la diversificación?
Como ya hemos mencionado anteriormente, el principal beneficio de la diversificación es la reducción del riesgo, pero existen otras razones por las cuales es una buena práctica:
- Reduces la volatilidad de los rendimientos a largo plazo. En general, mejoras el potencial de rendimiento de tu capital.
- Le sacas el máximo provecho de las fluctuaciones del mercado y las condiciones de la economía, pues disminuyes el grado de sensibilidad de tu cartera ante coyunturas.
- Puedes estar tranquilo de que tendrás liquidez para cada meta u horizonte que te planteaste al comenzar a invertir.
- Las ganancias que obtengas en una inversión, pueden compensar las pérdidas que hayas tenido en otros productos. Tu rentabilidad será un promedio y no dependerá de un solo activo.
Para concluir…
Sabemos que la posibilidad de rentabilizar en varios productos financieros, está relacionada con la capacidad económica que poseas y que en ocasiones, es difícil disponer de capital para invertir en muchos activos. Sin embargo, procura que haya una diversificación en las alternativas en las que decidas hacerlo, así sean pocas.